La Serpiente confía generalmente en su propio juicio más que en ningún consejo desde fuera y lo más frecuente es que tenga razón. La Serpiente es un signo kármico; su vida comienza y termina en el triunfo o en la tragedia y aunque lo niegue, es muy supersticiosa.

Es muy poco probable que un nativo de este signo tenga problemas de dinero; siempre consigue lo que necesita.. En el caso que sufriera pérdidas importantes, seguramente esa situación no se volverá a repetir ya que la Serpiente aprende rápidamente. Puede llegar a compensar las perdidas a una velocidad sorprendente y en general es muy prudente en los negocios. Es posible que, si una Serpiente sufre privaciones extremas en su juventud, no logre superarlo jamás, razón por la cual puede convertirse en un ser fanatizado por la avaricia.